Hace más de 40 años que el nombre de Iruela es sinónimo de aceitunas y encurtidos de calidad. Pedro Iruela «padre» fue el primero en dedicar esfuerzo, entusiasmo y cariño a su producción y comercialización.
Su hijo Pedro mantiene ese gusto familiar por los productos más selectos y exclusivos. El sabor permanece, la tradición perdura.